Vol. 12/ Núm. 3 2025 pág. 669
https://doi.org/10.69639/arandu.v12i3.1337

La relación entre la simbiosis microbiana intestinal, los
prebióticos y probióticos, y su impacto en la salud mental

The relationship between intestinal microbial symbiosis, prebiotics and probiotics, and

their impact on mental health

Alexis David
Hernández Mella
ahernandezm7
@unemi.edu.ec
https://orcid.org/0000
-0002-8133-2642
Universidad Estatal de Milagro

MilagroEcuador

Keyla Ninoska Briones Franco

kbrionesf@unemi.edu.ec

https://orcid.org/0000-0002-8133-2642

Universidad Estatal de Milagro

MilagroEcuador

Artículo recibido: 18 junio 2025 - Aceptado para publicación: 28 julio 2025

Conflictos de intereses: Ninguno que declarar.

RESUMEN

Este articulo
se centra en la relación entre la simbiosis microbiana intestinal, los prebióticos y
probióticos, y su impacto en la salud mental, específicamente en la depresión y ansiedad. La
simbiosis entre los microorganismos intestinales y el cuerpo humano ha mostrado una relación
importante con la regulación de diversas funciones fisiológicas, incluyendo el sistema nervioso.
Este ensayo analizará cómo los prebióticos y probióticos pueden influir en el microbiota intestinal
y, a su vez, en la modulación de trastornos como la depresión y la ansiedad.

Palabras clave:
microbioticos, prebióticos, probióticos, salud mental y simbiosis
ABSTRACT

This article focuses on the relationship between gut microbial symbiosis, prebiotics, and

probiotics, and their impact on mental health, specifically depression and anxiety. The symbiosis

between gut microorganisms and the human body has been shown to be i
mportant in the
regulation of various physiological functions, including the nervous system. This essay will

analyze how prebiotics and probiotics can influence the gut microbiota and, in turn, modulate

disorders such as depression and anxiety.

Keywords
: microbiotics, prebiotics, probiotics, mental health and symbiosis
Todo el contenido de la Revista Científica Internacional Arandu UTIC publicado en este sitio está disponible bajo
licencia Creative Commons Atribution 4.0 International.
Vol. 12/ Núm. 3 2025 pág. 670
INTRODUCCIÓN

El eje microbiota-intestino-cerebro ha surgido como un campo de estudio fundamental para
entender la relación entre los microorganismos intestinales y la salud mental. Diversos estudios
han demostrado que el equilibrio microbiano en el intestino influye en la regulación de procesos
cerebrales, afectando trastornos psicológicos como la depresión y la ansiedad. En este contexto,
los prebióticos y probióticos cumple un papel esencial al promover la simbiosis microbiana, lo
que podría tener efectos positivos en la modulación de estos trastornos mentales. A medida que
la investigación sobre este tema avanza, se ha observado que un desequilibrio en el microbiota
intestinal podría estar vinculado a la aparición y exacerbación de condiciones psicológicas.

Este ensayo desarrollará la importancia de la simbiosis intestinal y su influencia sobre la
salud mental, específicamente en relación con la depresión y la ansiedad. A través de un análisis
detallado de los prebióticos y probióticos, se explicará cómo la regulación del microbiota puede
contribuir a mejorar el bienestar psicológico, el cual se abordarán los mecanismos biológicos
involucrados, así como las implicaciones de los tratamientos que modulan el microbioma
intestinal, con el fin de proponer posibles estrategias terapéuticas para el manejo de estos
trastornos.

Objetivo general

Analizar el impacto de la simbiosis microbiota-intestino-cerebro, mediada por prebióticos
y probióticos, en la modulación de trastornos psicológicos como la depresión y ansiedad.

Objetivos específicos

1.
Examinar la relación entre el equilibrio microbiota intestinal y la salud mental, enfocándose
en la depresión y ansiedad.

2.
Evaluar cómo los prebióticos y probióticos contribuyen al equilibrio del microbiota
intestinal y su influencia en los trastornos psicológicos.

3.
Proponer estrategias terapéuticas basadas en la modulación del microbiota intestinal para
el tratamiento de la depresión y la ansiedad.

MATERIALES Y MÉTODOS

Para darle cumplimiento al objetivo se desarrolló una revisión bibliográfica en la que se
recopiló, analizó, sintetizó y discutió la información publicada
ha surgido como un campo de
estudio fundamental para entender la relación entre los microorganismos intestinales y la salud
mental
, que incluyó un examen crítico del estado de los conocimientos reportados en la
literatura, el método empleado fue la revisión documental, el que permitió identificar
las investigaciones elaboradas con anterioridad, las autorías y sus discusiones. El sustento
teórico para el abordaje de la problemática señalada se ubica desde diferentes perspectivas.
Vol. 12/ Núm. 3 2025 pág. 671
RESULTADOS Y DISCUSIÓN

El eje microbiota-intestino-cerebro: una perspectiva general

Definición y función del eje microbiota-intestino-cerebro

El eje microbiota-intestino-cerebro es un sistema complejo de comunicación bidireccional
entre el intestino y el cerebro, que involucra interacciones entre el microbioma intestinal, el
sistema nervioso central y el sistema inmune. Este eje está mediado por señales químicas,
nerviosas y hormonales que facilitan la interacción entre el intestino y el cerebro
(Foster, J. A., &
McVey Neufeld, K. A., 2013)
.
Explicación del concepto de eje microbiota-intestino-cerebro

El microbiota intestinal está compuesto por billones de microorganismos (bacterias,
hongos, virus) que residen en el intestino y desempeñan un rol fundamental en la salud
digestiva, metabólica e inmune.

La comunicación entre el intestino y el cerebro se lleva a cabo a través de diversas vías:
Nerviosa: El nervio vago, el nervio principal del sistema parasimpático, conecta el
intestino con el cerebro.

Endocrina: Las hormonas intestinales como la ghrelina y la leptina envían señales
al cerebro para regular el hambre y la saciedad.

Inmunológica: El sistema inmune intestinal influye en la producción de citoquinas
y otras moléculas que pueden afectar el cerebro.

Cómo las bacterias intestinales influyen en el cerebro y la salud mental

Las bacterias intestinales producen una variedad de metabolitos, como ácidos grasos de
cadena corta (AGCC), que tienen un efecto directo sobre el cerebro al afectar la
inflamación, la neuroplasticidad y la producción de neurotransmisores.

El microbiota también puede influir en la función del eje HPA (hipotálamo-pituitaria-
suprarrenal), que regula la respuesta al estrés.

Ejemplo de tabla sobre la función de las bacterias intestinales en la salud mental

Tabla 1

función de las bacterias intestinales en la salud mental

Tipos de bacterias
Metabolito/Señal de
producción
Efecto sobre el cerebro
Especies de
bifidobacterias.

Ácidos grasos de cadena
corta (AGCC)

Reducción de la
inflamación y modulación
del estado de ánimo.

Bacterias del género
Lactobacillus.

GABA (ácido gamma-
aminobutírico)

Efecto ansiolítico y
sedante, mejora de la
función cognitiva.
Vol. 12/ Núm. 3 2025 pág. 672
Firmicutes
Ácido butírico
Promueve la
neuroplasticidad y modula
la ansiedad.

Mecanismos biológicos involucrados

El eje microbiota-intestino-cerebro actúa a través de diversos mecanismos biológicos que
afectan tanto la función cerebral como la salud mental.

Producción de neurotransmisores como la serotonina y su relación con el estado de ánimo

Serotonina: Aproximadamente el 90-95% de la serotonina, neurotransmisor crucial en la
regulación del estado de ánimo, se produce en el intestino. El microbiota intestinal regula
la síntesis de serotonina en las células entero-endocrinas, y de allí, estas señales pueden
viajar al cerebro a través del nervio vago y otras vías.

Impacto en el estado de ánimo: La deficiencia de serotonina está asociada con trastornos
del ánimo como la depresión y la ansiedad. Así, un microbiota desequilibrado (disbiosis)
puede reducir la producción de serotonina, contribuyendo a la aparición de trastornos
emocionales
(Gareau, M. G., & Kennedy, P. J., 2011).
Modulación del sistema inmune y su impacto en el cerebro

El microbiota intestinal influye en el sistema inmune de dos maneras principales:
1.
Regulación de la inflamación: Las bacterias intestinales ayudan a mantener el equilibrio
entre citoquinas proinflamatorias y antiinflamatorias. Un desequilibrio puede contribuir a
la inflamación crónica, que está asociada con trastornos mentales como la depresión.

2.
Interacción con el eje HPA: El eje HPA regula la respuesta al estrés, y el microbiota
intestinal puede influir en la activación de este eje, modificando la producción de cortisol,
la hormona del estrés, lo que a su vez impacta en el estado emocional.

Ejemplo de tabla sobre los mecanismos biológicos

Tabla 2

Mecanismos biológicos

Mecanismo
Descripción Efectos en la salud
mental

Producción de
serotonina

El intestino produce más
del 90% de la serotonina
que regula el ánimo.

La disbiosis puede
disminuir la serotonina,
contribuyendo a la
depresión.

Modulación del
sistema inmune

El microbiota regula la
inflamación y las
respuestas inmunológicas.

La inflamación crónica
puede estar vinculada a la
depresión y ansiedad.
Vol. 12/ Núm. 3 2025 pág. 673
Interacción con el eje
HPA

El microbiota influye en la
producción de cortisol
(hormona del estrés).

La activación del eje HPA
puede contribuir a
trastornos de ansiedad y
estrés.

Conexión entre el intestino y el cerebro en trastornos mentales

La relación entre el microbiota intestinal y los trastornos psicológicos como la depresión y
la ansiedad se está investigando cada vez más, sugiriendo que el desequilibrio microbiano puede
desempeñar un papel crucial.

Relación entre la microbiota intestinal y trastornos psicológicos como la depresión y
ansiedad

Disbiosis y salud mental: La disbiosis es el desequilibrio en el microbiota intestinal, donde
disminuye la diversidad de bacterias beneficiosas. Este desequilibrio puede alterar la
producción de neurotransmisores, aumentar la inflamación y modificar la respuesta al
estrés, factores todos involucrados en la depresión y la ansiedad.

Estudios de relación: Varios estudios han demostrado que las personas con trastornos de
ansiedad y depresión presentan un perfil microbiano distinto al de personas sin estos
trastornos. En particular, se ha observado que los niveles bajos de Firmicutes y
Bacteroidetes están asociados con trastornos emocionales.

Revisión de estudios relevantes que muestran la relación entre microbiota intestinal y
bienestar emocional

Un estudio realizado por (Bercik, P., & Collins, S. M., 2014), reveló que las personas con
depresión tienen un microbiota intestinal alterada en comparación con las personas sanas,
lo que sugiere que un microbioma desequilibrado podría desempeñar un papel en el
desarrollo de trastornos emocionales.

Otro estudio de (Aizawa, E., Kato, T., & Takada, M., 2016), encontraron que el tratamiento
con probióticos en modelos animales mejoró significativamente los síntomas de la
ansiedad, al restaurar el equilibrio microbiano y reducir los niveles de inflamación cerebral.

El papel de los prebióticos en la modulación del microbiota intestinal

Definición y funciones de los prebióticos

Los prebióticos son componentes no digeribles de los alimentos que promueven el
crecimiento y la actividad de bacterias beneficiosas en el intestino. A diferencia de los probióticos,
que son microorganismos vivos, los prebióticos son compuestos dietéticos que actúan como
alimento para el microbiota intestinal, favoreciendo un entorno que beneficia la salud del huésped.

Mecanismo de acción en el microbiota intestinal

Los prebióticos no son digeridos por las enzimas humanas, pero son fermentados por las
bacterias del intestino, es decir, este proceso fermentativo produce ácidos grasos de cadena corta
Vol. 12/ Núm. 3 2025 pág. 674
(AGCC), que tienen efectos antiinflamatorios y mejoran la salud intestinal. Además, los
prebióticos favorecen la producción de nutrientes esenciales para la función intestinal y la
modulación del sistema inmune.

Tipos comunes de prebióticos y sus fuentes alimenticias

Fibra dietética: La fibra soluble (como la pectina y los betaglucanos) es un prebiótico
clásico que se encuentra en alimentos como frutas (manzanas, peras), verduras (zanahorias,
brócoli), y legumbres (lentejas, frijoles).

Oligosacáridos: Incluyen los fructooligosacáridos (FOS) y los galactooligosacáridos
(GOS), que se encuentran en alimentos como cebollas, plátanos, ajo y legumbres.

Inulina: Un tipo de fibra soluble que se encuentra en alimentos como el ajo, la alcachofa
de Jerusalén y el puerro.

Resistencia al almidón: Se encuentra en alimentos como el arroz, la avena y las patatas, y
también se comporta como prebiótico al llegar intacto al intestino grueso.

Efectos de los prebióticos sobre el microbiota intestinal

Favorecimiento del crecimiento de bacterias beneficiosas: Los prebióticos promueven
el crecimiento de bacterias beneficiosas, como Bifidobacterium y Lactobacillus. Estas
bacterias producen ácido láctico y otros ácidos grasos de cadena corta (como el butirato),
que reducen el pH del intestino, creando un ambiente inhóspito para bacterias patógenas.
Además, la producción de AGCC favorece la integridad de la barrera intestinal y tiene
efectos antiinflamatorios.

Impacto en el equilibrio microbiano y la biodiversidad intestinal: Los prebióticos
contribuyen a restaurar y mantener el equilibrio entre bacterias beneficiosas y patógenas en
el intestino. Un microbiota equilibrado es fundamental para la salud intestinal y la
prevención de enfermedades, como el síndrome del intestino irritable, la obesidad y las
enfermedades inflamatorias intestinales. La biodiversidad microbiana también está
relacionada con una mejor respuesta inmune y menor inflamación.

Prebióticos y salud mental: Un enfoque terapéutico

Mecanismos a través de los cuales los prebióticos pueden mejorar el bienestar
emocional: Los prebióticos influyen en la salud mental mediante la modulación del eje
microbiota-intestino-cerebro, es decir, los ácidos grasos de cadena corta producidos por la
fermentación de los prebióticos tienen efectos antiinflamatorios y neuroprotectores, lo que
ayuda a reducir la inflamación cerebral asociada con trastornos mentales. Además, los
prebióticos pueden aumentar la producción de neurotransmisores como la serotonina, que
es crucial para la regulación del estado de ánimo.
Vol. 12/ Núm. 3 2025 pág. 675
Estudios sobre la relación entre los prebióticos y la reducción de síntomas de ansiedad y
depresión

Un estudio realizado por (Mayer, E. A., Knight, R., Mazmanian, S. K., & Cryan, J. F.,
2014)
mostraron que el consumo de prebióticos puede reducir los síntomas de depresión y
ansiedad al equilibrar el microbiota intestinal y mejorar la respuesta inmune.

En otro estudio, (Alicia Cummings, Amebu Seddoh & Brianna Jallo, 2014) encontraron
que los suplementos de prebióticos como los FOS redujeron los síntomas de ansiedad en
modelos animales, sugiriendo que la regulación del microbiota intestinal podría tener
implicaciones terapéuticas en trastornos mentales.

(Zhao, L., Wu, Z., & Wang, Y., 2017)demostraron que el consumo de fibra prebiótica
también tiene efectos beneficiosos sobre la memoria y el comportamiento en humanos, lo
que apunta a su potencial para mejorar el bienestar emocional y reducir los síntomas
relacionados con la ansiedad y la depresión.

Los probióticos y su influencia en la salud mental

Definición y funciones de los probióticos

Los probióticos son microorganismos vivos que, cuando se administran en cantidades
adecuadas, confieren beneficios para la salud del huésped, especialmente al contribuir al
equilibrio del microbiota intestinal. Actúan de manera similar a los "buenos" microorganismos,
ayudando a restaurar y mantener una flora intestinal saludable, que es esencial para el
funcionamiento óptimo del sistema digestivo y el sistema inmune.

Contribución al equilibrio del microbiota intestinal: Los probióticos ayudan a mantener
un equilibrio adecuado entre las bacterias patógenas y los beneficiosas en el intestino, el
cual actúan como una barrera natural, reduciendo la proliferación de microorganismos
dañinos y mejorando la función de la barrera intestinal. Además, promueven la producción
de ácidos grasos de cadena corta, como el butirato, que son esenciales para la salud
intestinal y la modulación del sistema inmunológico.

Principales tipos de probióticos y sus fuentes

Lactobacillus: Se encuentra comúnmente en yogur, kéfir y otros productos lácteos
fermentados. Lactobacillus ayuda a descomponer los alimentos en el intestino y produce
ácido láctico, favoreciendo un ambiente intestinal saludable.

Bifidobacterium: Se encuentra en alimentos fermentados como el yogur y los suplementos
probióticos. Esta bacteria promueve la digestión y la absorción de nutrientes.

Saccharomyces boulardii: Un tipo de levadura probiótica que se encuentra en
suplementos y se utiliza para el tratamiento de trastornos digestivos.

Suplementos probióticos: Se presentan en diversas formas como cápsulas, tabletas, polvo
y líquidos, y están disponibles para complementar la dieta.
Vol. 12/ Núm. 3 2025 pág. 676
Mecanismos de acción de los probióticos en el cuerpo

Modulación de la respuesta inflamatoria y el sistema inmunológico: Los probióticos
modulan la respuesta inflamatoria al interactuar con las células inmunes en el intestino, a
través de la producción de ácidos grasos de cadena corta (AGCC), los probióticos ayudan
a reducir la inflamación sistémica. Esta función es particularmente relevante, ya que la
inflamación crónica de bajo grado está asociada con trastornos psiquiátricos como la
depresión y la ansiedad. Al restaurar el equilibrio del microbiota intestinal, los probióticos
pueden mejorar la respuesta inmune y reducir la inflamación cerebral, contribuyendo así a
un mejor estado emocional.

Efectos sobre la producción de neurotransmisores y la salud cerebral: Los probióticos
influyen en la producción de neurotransmisores como la serotonina, la dopamina y el ácido
gamma-aminobutírico (GABA), los cuales son fundamentales para la regulación del estado
de ánimo, el cual se estima que aproximadamente el 90% de la serotonina se produce en el
intestino, por lo que el equilibrio microbiano puede tener un impacto directo en la función
cerebral. Los probióticos también modulan la actividad del sistema nervioso autónomo,
influyendo en la respuesta al estrés y mejorando la función cognitiva.

Probióticos como terapia para la depresión y ansiedad

Revisión de estudios sobre el uso de probióticos en el tratamiento de trastornos emocionales

Diversos estudios han explorado los efectos terapéuticos de los probióticos en trastornos
emocionales como la depresión y la ansiedad. Según
(Akhondzadeh, S., Sabet, M. S., &
Moin, M., 2010)
el uso de Lactobacillus y Bifidobacterium ha mostrado resultados
positivos en la reducción de los síntomas de ansiedad en pacientes con trastornos
gastrointestinales.

Además, (Markle, J. G., Frank, D. N., & Mortin-Todd, R. L., 2013) afirma que, encontraron
que el consumo de probióticos redujo los niveles de cortisol, una hormona asociada con el
estrés, en individuos con trastornos de ansiedad.

Evidencia de los beneficios terapéuticos de los probióticos en la salud mental

En un estudio reciente de (Din, F. G., & Cryan, J. F., 2016), se observará que los probióticos
pueden mejorar el comportamiento y reducir los síntomas de la depresión al influir en el
microbiota intestinal.

De manera similar, (Savignac, H. M., Kiely, B., & Dinan, T. G., 2015) reportaron que los
probióticos pueden tener un efecto antidepresivo, al reducir los niveles de proinflamatorios
y aumentar la producción de serotonina.

Los efectos terapéuticos de los probióticos en la salud mental se atribuyen a su capacidad
para regular el eje microbiota-intestino-cerebro, lo que influye en la neuroquímica cerebral y la
respuesta al estrés.
Vol. 12/ Núm. 3 2025 pág. 677
Simbiosis intestinal y su impacto en el tratamiento de la depresión y ansiedad

La simbiosis microbiana: Un concepto clave en la salud intestinal

La simbiosis microbiana se refiere a la relación mutuamente beneficiosa entre los
microorganismos que habitan en el intestino humano y el huésped, es decir, un microbiota
equilibrado es esencial para la homeostasis general, incluyendo la regulación inmunológica y la
protección contra infecciones. En el contexto de la salud mental, la simbiosis intestinal es
importante para el equilibrio del sistema nervioso central (SNC) a través del eje microbiota-
intestino-cerebro.

El impacto de un microbiota equilibrado en el bienestar físico y mental

Un microbiota intestinal equilibrado está relacionado con el bienestar físico y emocional,
ya que contribuye a la producción de neurotransmisores como la serotonina, que regula el ánimo,
y a la modulación del sistema inmunológico, por tanto, la disbiosis o desequilibrio microbiano,
por otro lado, ha sido vinculada con trastornos como la depresión y la ansiedad.

Desequilibrio microbiano y su relación con trastornos psicológicos

Cómo el desequilibrio del microbiota (disbiosis) puede contribuir a la aparición de
depresión y ansiedad

La disbiosis intestinal, que se refiere a la alteración de la composición microbiana
intestinal, puede inducir una respuesta inflamatoria que afecta la función cerebral. Esta
inflamación está asociada con trastornos psiquiátricos como la depresión y la ansiedad. Los
estudios han demostrado que la disbiosis favorece un estado de hiperactividad inflamatoria
que impacta la comunicación entre el intestino y el cerebro.

Mecanismos de disbiosis que afectan la comunicación intestino-cerebro

La disbiosis altera la producción de neurotransmisores y favorece la liberación de
citoquinas proinflamatorias, las cuales afectan negativamente al cerebro. Esta alteración en
la biota intestinal puede generar un círculo vicioso en el que el estrés y la inflamación
afectan negativamente la función intestinal, exacerbando los síntomas de ansiedad y
depresión.
Vol. 12/ Núm. 3 2025 pág. 678
Restaurando la simbiosis: Prebióticos y probióticos como tratamiento

Tabla 3

Restaurando la simbiosis intestinal mediante prebióticos y probióticos

Estrategia
Descripción
Impacto en el
microbiota
intestinal

Implicaciones
para la salud
mental

Estudios
relevantes

Prebióticos

Los prebióticos
son sustancias no
digeribles
(generalmente
fibra y
oligosacáridos)
que promueven el
crecimiento y la
actividad de
bacterias
beneficiosas.

Favorecen el
crecimiento de
bacterias
beneficiosas
como
Bifidobacterium
y Lactobacillus.
Mejoran la
biodiversidad
intestinal y el
equilibrio
microbiano.

Restauran la
simbiosis
intestinal, lo que
puede mejorar la
producción de
neurotransmisores
como la
serotonina,
afectando
positivamente el
ánimo y
reduciendo los
síntomas de
ansiedad y
depresión.

Messaoudi et al.

(2011); Savignac

et al.
(2015)
Probióticos

Los probióticos
son
microorganismos
vivos que,
cuando se
consumen en
cantidades
adecuadas, tienen
efectos
beneficiosos para
la salud
intestinal.

Modulan el
microbiota
intestinal al
aumentar la
cantidad de
bacterias
beneficiosas y
reducir las
bacterias
patógenas.
Ayudan a
mantener la
homeostasis
intestinal.

Los probióticos
influyen en la
comunicación
intestino-cerebro,
mejorando la
respuesta
inflamatoria y los
niveles de
neurotransmisores,
lo que podría
aliviar trastornos
como la depresión
y la ansiedad.

Akhondzadeh et
al. (2010);
Messaoudi et al.
(2011)

Dietoterapia
(Prebióticos +
Probióticos)

Combinación de
alimentos ricos
en prebióticos y
probióticos o
suplementos para
mejorar la salud
intestinal.

Sinergia entre
prebióticos y
probióticos para
promover una
microbiota
equilibrada y
funcional. Esto
optimiza la
diversidad
microbiana y la
actividad
metabólica.

Un microbiota
equilibrado
favorece la
reducción de la
inflamación y
mejora la
respuesta
emocional,
contribuyendo a la
gestión de
trastornos como la

Din et al. (2016);
Akhondzadeh et
al. (2010)
Vol. 12/ Núm. 3 2025 pág. 679
ansiedad y la
depresión.

CONCLUSIONES

Este articulo ha explorado la relación entre la simbiosis microbiana intestinal, los
prebióticos y los probióticos, y su impacto en la salud mental, específicamente en trastornos como
la depresión y la ansiedad. A través de la revisión de diversos estudios, se ha evidenciado cómo
el equilibrio del microbiota intestinal desempeña un papel crucial en la regulación de funciones
fisiológicas que afectan directamente el estado mental, y cómo los prebióticos y probióticos
pueden promover este equilibrio.

Se concluye que el eje microbiota-intestino-cerebro es un vínculo clave entre la salud
intestinal y mental, y que un desequilibrio en el microbiota (disbiosis) está estrechamente
asociado con trastornos psicológicos como la depresión y la ansiedad. El consumo de prebióticos
y probióticos puede mejorar el equilibrio microbiano, lo que potencialmente contribuye a la
reducción de los síntomas de estos trastornos. Sin embargo, el campo está aún en desarrollo, y se
requiere más investigación para confirmar los mecanismos exactos y la efectividad terapéutica de
los tratamientos microbiota-moduladores.

A medida que el campo del microbiota intestinal y su relación con la salud mental continúa
expandiéndose, existen diversas áreas de estudio que podrían ser exploradas. Por ejemplo, la
investigación de los efectos a largo plazo del uso de prebióticos y probióticos en la salud mental,
la evaluación de diferentes cepas bacterianas y sus efectos específicos sobre la depresión y la
ansiedad, y el análisis de las variaciones individuales en la respuesta al tratamiento. Además, sería
valioso estudiar el impacto de la dieta y los factores ambientales en el microbiota intestinal y su
influencia en el bienestar psicológico.
Vol. 12/ Núm. 3 2025 pág. 680
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