Vol. 12/ Núm. 2 2025 pág. 1767
https://doi.org/10.69639/arandu.v12i2.1025
Educación para el bienestar docente: Estrategias
institucionales innovadoras para prevenir el burnout docente
Education for teacher well-being: Innovative institutional strategies to prevent burnout
Martha Robles Pulecio
martharoblespulecio@hotmail.com
https://orcid.org/0009-0005-1106-9681
Ministerio de Educación
Babahoyo - Ecuador
Ingrid Carpio Quiroz
carpioingri@hotmail.com
https://orcid.org/0009-0008-2328-7856
Ministerio de Educación
Montalvo – Ecuador
Kleber Vite Sánchez
klever.vite@outlook.es
https://orcid.org/0009-0008-1480-5746
Ministerio de Educación
Babahoyo-Ecuador
Roxanna Santillan Duchi
roxanna1993_@hotmail.com
https://orcid.org/0009-0008-7834-5400
Ministerio de Educación
Babahoyo-Ecuador
Cecilia Hualpa LLiguin
clareta2210@hotmail.com
https://orcid.org/0009-0006-4405-8206
Ministerio de Educación
Guayaquil-Ecuador
Artículo recibido: 10 marzo 2025 - Aceptado para publicación: 20 abril 2025
Conflictos de intereses: Ninguno que declarar
RESUMEN
El presente estudio aborda el problema del desgaste profesional docente y su relación con el
bienestar integral de los educadores en el contexto escolar. La investigación se realizó con la
participación de docentes pertenecientes a los niveles de Básica Superior y Bachillerato de la
Unidad Educativa del Milenio Ileana Espinel Cedeño, en la ciudad de Guayaquil, Ecuador. Se
utilizó un enfoque cualitativo con diseño descriptivo, aplicando entrevistas semiestructuradas
para recoger las percepciones, experiencias y propuestas de los participantes en torno al tema
investigado. Los hallazgos revelan que factores como la sobrecarga administrativa, la falta de
tiempo personal, la atención constante a padres de familia, la asignación de materias fuera de su
Vol. 12/ Núm. 2 2025 pág. 1768
especialidad y el escaso reconocimiento institucional afectan significativamente el bienestar
físico, emocional y mental de los docentes. Se concluye que es necesario fortalecer el
acompañamiento institucional, implementar programas de bienestar sostenidos y promover el
liderazgo empático de los directivos escolares. Las implicancias del estudio apuntan a la
necesidad urgente de políticas educativas centradas en el cuidado del capital humano docente
como base para una educación de calidad.
Palabras clave: bienestar docente, desgaste profesional, estrategias institucionales,
burnout
ABSTRACT
This study addresses the problem of teacher burnout and its relationship to the overall well-being
of educators in the school setting. The research was conducted with the participation of teachers
from the upper elementary and high school levels at the “Unidad Educativa del Milenio Ileana
Espinel Cedeño”, in the city of Guayaquil, Ecuador. A qualitative approach with a descriptive
design was used, using semi-structured interviews to gather participants' perceptions, experiences,
and proposals regarding the research topic. The findings reveal that factors such as administrative
overload, lack of personal time, constant attention to parents, assignment of subjects outside their
specialty, and limited institutional recognition significantly affect teachers' physical, emotional,
and mental well-being. It is concluded that it is necessary to strengthen institutional support,
implement sustained well-being programs, and promote empathetic leadership among school
leaders. The implications of the study point to the urgent need for educational policies focused on
the care of teachers' human capital as the basis for quality education.
keywords: teacher well-being, professional burnout, institutional strategies, burnout
Todo el contenido de la Revista Científica Internacional Arandu UTIC publicado en este sitio está disponible bajo
licencia Creative Commons Atribution 4.0 International.
especialidad y el escaso reconocimiento institucional afectan significativamente el bienestar
físico, emocional y mental de los docentes. Se concluye que es necesario fortalecer el
acompañamiento institucional, implementar programas de bienestar sostenidos y promover el
liderazgo empático de los directivos escolares. Las implicancias del estudio apuntan a la
necesidad urgente de políticas educativas centradas en el cuidado del capital humano docente
como base para una educación de calidad.
Palabras clave: bienestar docente, desgaste profesional, estrategias institucionales,
burnout
ABSTRACT
This study addresses the problem of teacher burnout and its relationship to the overall well-being
of educators in the school setting. The research was conducted with the participation of teachers
from the upper elementary and high school levels at the “Unidad Educativa del Milenio Ileana
Espinel Cedeño”, in the city of Guayaquil, Ecuador. A qualitative approach with a descriptive
design was used, using semi-structured interviews to gather participants' perceptions, experiences,
and proposals regarding the research topic. The findings reveal that factors such as administrative
overload, lack of personal time, constant attention to parents, assignment of subjects outside their
specialty, and limited institutional recognition significantly affect teachers' physical, emotional,
and mental well-being. It is concluded that it is necessary to strengthen institutional support,
implement sustained well-being programs, and promote empathetic leadership among school
leaders. The implications of the study point to the urgent need for educational policies focused on
the care of teachers' human capital as the basis for quality education.
keywords: teacher well-being, professional burnout, institutional strategies, burnout
Todo el contenido de la Revista Científica Internacional Arandu UTIC publicado en este sitio está disponible bajo
licencia Creative Commons Atribution 4.0 International.
Vol. 12/ Núm. 2 2025 pág. 1769
INTRODUCCIÓN
El bienestar del docente se ha convertido en un eje fundamental para lograr una educación
de calidad, ya que incide de forma directa en su motivación, su desempeño profesional y la
permanencia en el sistema educativo. No obstante, en los últimos tiempos se ha observado un
aumento en los niveles de agotamiento, desánimo y sobrecarga laboral entre los docentes, lo que
ha encendido alertas sobre la necesidad de generar respuestas institucionales más eficaces. Esta
situación, intensificada por los desafíos derivados de la educación en tiempos de crisis, pone en
evidencia la urgencia de investigar alternativas innovadoras que fortalezcan el bienestar
emocional y profesional del personal docente, especialmente en espacios donde aún no se han
desarrollado políticas sólidas de apoyo.
Algunas investigaciones recientes han resaltado la importancia de diseñar acciones que
favorezcan el equilibrio emocional y el sentido de pertenencia en el ámbito educativo. Por
ejemplo, se ha evidenciado que prácticas como el acompañamiento emocional, espacios de
escucha activa, y planes institucionales orientados al autocuidado contribuyen a reducir el estrés
y mejorar la satisfacción laboral. A pesar de estos avances, sigue existiendo una limitada
exploración de experiencias concretas en entornos escolares ecuatorianos, donde se requiere
profundizar en cómo las instituciones pueden generar condiciones sostenibles para cuidar de sus
docentes y prevenir el desgaste profesional.
Desde esta perspectiva, la presente investigación tiene como objetivo general: Identificar
las estrategias institucionales innovadoras que promueven el bienestar docente y previenen el
desgaste profesional en los docentes de Básica Superior y Bachillerato de la Unidad Educativa
del Milenio Ileana Espinel Cedeño, de la ciudad de Guayaquil, Ecuador. La pregunta que guía
este estudio es: ¿Qué tipo de acciones institucionales innovadoras se implementan en esta unidad
educativa para fortalecer el bienestar de sus docentes? Para dar respuesta a esta interrogante, se
empleará un enfoque cualitativo mediante entrevistas semiestructuradas que permitan recoger las
percepciones y experiencias del profesorado sobre el apoyo que reciben desde la institución para
mantenerse motivados, saludables y comprometidos con su labor.
Desgaste profesional o Burnout en docentes
El bienestar docente se concibe como una condición integral que abarca el equilibrio
emocional, físico y social del educador, permitiéndole desempeñarse con motivación, resiliencia
y satisfacción profesional (Córdoba et al., 2020). Desde un enfoque educativo, este bienestar no
solo es un derecho humano básico, sino también un factor esencial para garantizar prácticas
pedagógicas efectivas y un entorno escolar saludable. Diversos estudios han coincidido en que
los docentes que experimentan altos niveles de bienestar tienden a establecer mejores relaciones
con sus estudiantes, implementar metodologías más creativas y mantener una actitud positiva
frente a los retos del aula (Rodríguez et al., 2017; Räsänen et al., 2022; Monsivais et al., 2023).
INTRODUCCIÓN
El bienestar del docente se ha convertido en un eje fundamental para lograr una educación
de calidad, ya que incide de forma directa en su motivación, su desempeño profesional y la
permanencia en el sistema educativo. No obstante, en los últimos tiempos se ha observado un
aumento en los niveles de agotamiento, desánimo y sobrecarga laboral entre los docentes, lo que
ha encendido alertas sobre la necesidad de generar respuestas institucionales más eficaces. Esta
situación, intensificada por los desafíos derivados de la educación en tiempos de crisis, pone en
evidencia la urgencia de investigar alternativas innovadoras que fortalezcan el bienestar
emocional y profesional del personal docente, especialmente en espacios donde aún no se han
desarrollado políticas sólidas de apoyo.
Algunas investigaciones recientes han resaltado la importancia de diseñar acciones que
favorezcan el equilibrio emocional y el sentido de pertenencia en el ámbito educativo. Por
ejemplo, se ha evidenciado que prácticas como el acompañamiento emocional, espacios de
escucha activa, y planes institucionales orientados al autocuidado contribuyen a reducir el estrés
y mejorar la satisfacción laboral. A pesar de estos avances, sigue existiendo una limitada
exploración de experiencias concretas en entornos escolares ecuatorianos, donde se requiere
profundizar en cómo las instituciones pueden generar condiciones sostenibles para cuidar de sus
docentes y prevenir el desgaste profesional.
Desde esta perspectiva, la presente investigación tiene como objetivo general: Identificar
las estrategias institucionales innovadoras que promueven el bienestar docente y previenen el
desgaste profesional en los docentes de Básica Superior y Bachillerato de la Unidad Educativa
del Milenio Ileana Espinel Cedeño, de la ciudad de Guayaquil, Ecuador. La pregunta que guía
este estudio es: ¿Qué tipo de acciones institucionales innovadoras se implementan en esta unidad
educativa para fortalecer el bienestar de sus docentes? Para dar respuesta a esta interrogante, se
empleará un enfoque cualitativo mediante entrevistas semiestructuradas que permitan recoger las
percepciones y experiencias del profesorado sobre el apoyo que reciben desde la institución para
mantenerse motivados, saludables y comprometidos con su labor.
Desgaste profesional o Burnout en docentes
El bienestar docente se concibe como una condición integral que abarca el equilibrio
emocional, físico y social del educador, permitiéndole desempeñarse con motivación, resiliencia
y satisfacción profesional (Córdoba et al., 2020). Desde un enfoque educativo, este bienestar no
solo es un derecho humano básico, sino también un factor esencial para garantizar prácticas
pedagógicas efectivas y un entorno escolar saludable. Diversos estudios han coincidido en que
los docentes que experimentan altos niveles de bienestar tienden a establecer mejores relaciones
con sus estudiantes, implementar metodologías más creativas y mantener una actitud positiva
frente a los retos del aula (Rodríguez et al., 2017; Räsänen et al., 2022; Monsivais et al., 2023).
Vol. 12/ Núm. 2 2025 pág. 1770
De acuerdo con Schaufeli et al. (2017), el burnout es una condición laboral que se
manifiesta a través de un agotamiento severo, dificultades en la regulación emocional y cognitiva,
y una desconexión mental del trabajo. Este estado suele ir acompañado de síntomas como
desánimo, malestar psicológico y problemas físicos generales. Cuando esta situación ocurre en el
ámbito educativo, se le conoce como burnout docente, una experiencia marcada por el
agotamiento físico y emocional, la pérdida del entusiasmo por enseñar y una menor implicación
profesional (Skaalvik y Skaalvik, 2018).
Esta forma de desgaste suele originarse por factores estresantes propios del entorno
escolar, combinados con un desequilibrio entre las demandas del trabajo —como la carga
excesiva, las emociones implicadas o los conflictos institucionales— y la falta de recursos
personales o institucionales para enfrentarlos, como el apoyo social (Arvidsson et al., 2019;
Bakker y Demerouti, 2017; Madigan et al., 2023). Niveles elevados de agotamiento profesional
pueden repercutir en la productividad, generando mayores tasas de ausencias y abandono de la
profesión docente (Laybourn et al., 2019; Madigan y Kim, 2021).
MATERIALES Y MÉTODOS
Participantes
La presente investigación se realizó con la participación de 34 docentes que laboran en la
Unidad Educativa del Milenio Ileana Espinel Cedeño, ubicada en la ciudad de Guayaquil,
Ecuador. La muestra correspondió al total de la población docente de la institución, conformada
por hombres y mujeres con edades comprendidas entre los 28 y 62 años. Todos los participantes
se desempeñan en los niveles de Básica Superior y Bachillerato, con formación profesional en
áreas diversas del conocimiento. El criterio de inclusión consideró a docentes con al menos un
año de experiencia en la institución, mientras que el único criterio de exclusión fue la ausencia
durante el periodo de aplicación de la entrevista.
Procedimiento de muestreo
Se utilizó un muestreo no probabilístico de tipo intencional, ya que se trabajó con la
totalidad de la población docente disponible en la Unidad Educativa del Milenio Ileana Espinel
Cedeño. Dado que el número de docentes era reducido (N=34), se consideró pertinente realizar
un estudio censal. Los datos fueron recolectados en el contexto institucional, durante la jornada
laboral docente, en espacios previamente coordinados para asegurar la disponibilidad y
concentración de los participantes. Se garantizó la confidencialidad de las respuestas y el
consentimiento informado de todos los docentes entrevistados.
Técnicas e instrumentos de recolección de datos
La técnica principal empleada fue la entrevista semiestructurada, elaborada
específicamente para indagar sobre las percepciones y experiencias del profesorado en torno al
bienestar docente y las estrategias institucionales implementadas para prevenir el desgaste
De acuerdo con Schaufeli et al. (2017), el burnout es una condición laboral que se
manifiesta a través de un agotamiento severo, dificultades en la regulación emocional y cognitiva,
y una desconexión mental del trabajo. Este estado suele ir acompañado de síntomas como
desánimo, malestar psicológico y problemas físicos generales. Cuando esta situación ocurre en el
ámbito educativo, se le conoce como burnout docente, una experiencia marcada por el
agotamiento físico y emocional, la pérdida del entusiasmo por enseñar y una menor implicación
profesional (Skaalvik y Skaalvik, 2018).
Esta forma de desgaste suele originarse por factores estresantes propios del entorno
escolar, combinados con un desequilibrio entre las demandas del trabajo —como la carga
excesiva, las emociones implicadas o los conflictos institucionales— y la falta de recursos
personales o institucionales para enfrentarlos, como el apoyo social (Arvidsson et al., 2019;
Bakker y Demerouti, 2017; Madigan et al., 2023). Niveles elevados de agotamiento profesional
pueden repercutir en la productividad, generando mayores tasas de ausencias y abandono de la
profesión docente (Laybourn et al., 2019; Madigan y Kim, 2021).
MATERIALES Y MÉTODOS
Participantes
La presente investigación se realizó con la participación de 34 docentes que laboran en la
Unidad Educativa del Milenio Ileana Espinel Cedeño, ubicada en la ciudad de Guayaquil,
Ecuador. La muestra correspondió al total de la población docente de la institución, conformada
por hombres y mujeres con edades comprendidas entre los 28 y 62 años. Todos los participantes
se desempeñan en los niveles de Básica Superior y Bachillerato, con formación profesional en
áreas diversas del conocimiento. El criterio de inclusión consideró a docentes con al menos un
año de experiencia en la institución, mientras que el único criterio de exclusión fue la ausencia
durante el periodo de aplicación de la entrevista.
Procedimiento de muestreo
Se utilizó un muestreo no probabilístico de tipo intencional, ya que se trabajó con la
totalidad de la población docente disponible en la Unidad Educativa del Milenio Ileana Espinel
Cedeño. Dado que el número de docentes era reducido (N=34), se consideró pertinente realizar
un estudio censal. Los datos fueron recolectados en el contexto institucional, durante la jornada
laboral docente, en espacios previamente coordinados para asegurar la disponibilidad y
concentración de los participantes. Se garantizó la confidencialidad de las respuestas y el
consentimiento informado de todos los docentes entrevistados.
Técnicas e instrumentos de recolección de datos
La técnica principal empleada fue la entrevista semiestructurada, elaborada
específicamente para indagar sobre las percepciones y experiencias del profesorado en torno al
bienestar docente y las estrategias institucionales implementadas para prevenir el desgaste
Vol. 12/ Núm. 2 2025 pág. 1771
profesional. La entrevista constó de 10 preguntas abiertas, organizadas en torno a cuatro bloques
temáticos: bienestar docente, desgaste profesional, estrategias institucionales, innovación y
propuestas. El instrumento fue validado mediante juicio de expertos, lo cual permitió mejorar su
claridad y pertinencia antes de ser aplicado. Las entrevistas fueron grabadas con consentimiento
y posteriormente transcritas para su análisis.
Diseño de la investigación
El estudio adoptó un diseño cualitativo, no experimental, de tipo descriptivo-exploratorio,
ya que se centró en comprender la realidad desde las voces de los docentes sin manipular
variables. Esta aproximación permitió captar en profundidad las dinámicas, percepciones y
necesidades en torno al bienestar profesional dentro del contexto institucional. El enfoque
cualitativo fue pertinente para identificar patrones comunes y construir interpretaciones
significativas que orienten futuras acciones y estrategias educativas. Se realizó un diseño de
investigación transversal descriptivo, lo que implica una única recolección de datos realizada
durante el mes de febrero del 2025.
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
La presente sección expone los principales hallazgos obtenidos a través de las entrevistas
semiestructuradas realizadas a los docentes. A partir del análisis cualitativo, se identificaron
percepciones, vivencias y propuestas en torno al bienestar de los profesores, el desgaste
profesional y las estrategias institucionales implementadas o deseadas. Los resultados se
presentan organizados según los bloques temáticos del instrumento, acompañados de una
reflexión crítica que los vincula con estudios previos y marcos teóricos relevantes.
Bloque 1: Bienestar docente
¿Cómo describiría su estado actual de bienestar físico, emocional y mental en su rol como
docente?
Ante la pregunta sobre el estado actual de bienestar físico, emocional y mental, la mayoría
de los docentes entrevistados manifestó experimentar un equilibrio frágil, influenciado por la
sobrecarga administrativa, la presión de cumplir con múltiples responsabilidades y la falta de
tiempo para el autocuidado. Varios participantes coincidieron en que, aunque disfrutan la
enseñanza y el contacto con sus estudiantes, el cúmulo de tareas burocráticas -como la elaboración
de informes, planificación, y seguimiento de reforzamientos académicos- genera un desgaste
considerable. Algunos docentes señalaron que, para evitar procesos engorrosos y lentos, optan
por realizar los refuerzos de manera informal dentro del aula, sin notificar a la autoridad, lo cual
representa una forma de adaptarse a las exigencias institucionales, pero también refleja una
tensión entre el deber profesional y el cuidado personal.
No obstante, también emergieron algunas experiencias positivas. Algunos docentes
afirmaron que logran mantener cierto equilibrio emocional gracias al respaldo de sus compañeros
profesional. La entrevista constó de 10 preguntas abiertas, organizadas en torno a cuatro bloques
temáticos: bienestar docente, desgaste profesional, estrategias institucionales, innovación y
propuestas. El instrumento fue validado mediante juicio de expertos, lo cual permitió mejorar su
claridad y pertinencia antes de ser aplicado. Las entrevistas fueron grabadas con consentimiento
y posteriormente transcritas para su análisis.
Diseño de la investigación
El estudio adoptó un diseño cualitativo, no experimental, de tipo descriptivo-exploratorio,
ya que se centró en comprender la realidad desde las voces de los docentes sin manipular
variables. Esta aproximación permitió captar en profundidad las dinámicas, percepciones y
necesidades en torno al bienestar profesional dentro del contexto institucional. El enfoque
cualitativo fue pertinente para identificar patrones comunes y construir interpretaciones
significativas que orienten futuras acciones y estrategias educativas. Se realizó un diseño de
investigación transversal descriptivo, lo que implica una única recolección de datos realizada
durante el mes de febrero del 2025.
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
La presente sección expone los principales hallazgos obtenidos a través de las entrevistas
semiestructuradas realizadas a los docentes. A partir del análisis cualitativo, se identificaron
percepciones, vivencias y propuestas en torno al bienestar de los profesores, el desgaste
profesional y las estrategias institucionales implementadas o deseadas. Los resultados se
presentan organizados según los bloques temáticos del instrumento, acompañados de una
reflexión crítica que los vincula con estudios previos y marcos teóricos relevantes.
Bloque 1: Bienestar docente
¿Cómo describiría su estado actual de bienestar físico, emocional y mental en su rol como
docente?
Ante la pregunta sobre el estado actual de bienestar físico, emocional y mental, la mayoría
de los docentes entrevistados manifestó experimentar un equilibrio frágil, influenciado por la
sobrecarga administrativa, la presión de cumplir con múltiples responsabilidades y la falta de
tiempo para el autocuidado. Varios participantes coincidieron en que, aunque disfrutan la
enseñanza y el contacto con sus estudiantes, el cúmulo de tareas burocráticas -como la elaboración
de informes, planificación, y seguimiento de reforzamientos académicos- genera un desgaste
considerable. Algunos docentes señalaron que, para evitar procesos engorrosos y lentos, optan
por realizar los refuerzos de manera informal dentro del aula, sin notificar a la autoridad, lo cual
representa una forma de adaptarse a las exigencias institucionales, pero también refleja una
tensión entre el deber profesional y el cuidado personal.
No obstante, también emergieron algunas experiencias positivas. Algunos docentes
afirmaron que logran mantener cierto equilibrio emocional gracias al respaldo de sus compañeros
Vol. 12/ Núm. 2 2025 pág. 1772
de trabajo, al sentido de vocación y al reconocimiento de sus estudiantes. Mencionaron que, a
pesar del agotamiento físico y mental, encuentran motivación en los logros académicos del aula
y en los momentos de conexión humana que se generan en el proceso educativo. Sin embargo,
incluso entre quienes dijeron sentirse emocionalmente estables, se reconoció que este bienestar
es frágil y constantemente amenazado por la sobrecarga de trabajo, los escasos espacios de
escucha institucional y la falta de políticas escolares que prioricen el bienestar del personal
docente. Esta percepción coincide con lo planteado por Madigan et al. (2023), quienes advierten
que el bienestar laboral se ve afectado cuando las exigencias superan los recursos y apoyos
disponibles.
¿Qué factores considera que más afectan su bienestar en el contexto escolar?
Los docentes entrevistados identificaron varios factores que afectan negativamente su
bienestar en el entorno escolar, siendo los más mencionados la carga administrativa excesiva, el
escaso tiempo para la planificación pedagógica y el seguimiento académico de los estudiantes,
así como la presión que generan las evaluaciones trimestrales de desempeño docente aplicadas
por la institución. Estas evaluaciones, que buscan monitorear y mejorar la práctica profesional,
son percibidas por algunos docentes como estresantes, ya que no siempre consideran el contexto
real de trabajo ni las limitaciones operativas del día a día.
Asimismo, señalaron que deben responder a múltiples exigencias simultáneas, como
elaboración de informes, cumplimiento de proyectos institucionales, refuerzos académicos
informales y participación en actividades extracurriculares. A esto se suma la atención a padres
de familia, que en muchos casos demandan tiempo adicional y representan desafíos emocionales
mayores que los propios estudiantes, al mostrar actitudes confrontativas o poco colaborativas.
Esta sobrecarga, unida a la falta de reconocimiento o espacios de apoyo emocional,
genera un desgaste progresivo. Tal como lo plantean Schaufeli et al. (2017) y Kyriacou (2015),
el burnout docente se desarrolla precisamente en escenarios donde las demandas laborales superan
la capacidad personal e institucional para enfrentarlas, deteriorando el bienestar emocional, físico
y profesional del educador.
¿Qué prácticas o hábitos personales ha adoptado para cuidar su bienestar?
Ante la pregunta sobre las prácticas o hábitos personales adoptados para cuidar su
bienestar, los docentes entrevistados mencionaron actividades como caminar, descansar,
compartir tiempo con la familia, escuchar música, mantener una alimentación balanceada y, en
algunos casos, realizar ejercicios ligeros. Muchos coincidieron en que el tiempo fuera del aula es
fundamental para desconectarse del estrés laboral. Un docente señaló: "Trato de dejar los
pendientes en la escuela, en casa soy padre y esposo, no profesor", mientras que otra docente
comentó: "A veces solo necesito silencio, llegar a casa, cerrar la puerta y respirar profundo".
Estas respuestas evidencian que, aunque no siempre se accede a estrategias institucionales, los
docentes buscan pequeñas acciones cotidianas para preservar su bienestar físico y emocional.
de trabajo, al sentido de vocación y al reconocimiento de sus estudiantes. Mencionaron que, a
pesar del agotamiento físico y mental, encuentran motivación en los logros académicos del aula
y en los momentos de conexión humana que se generan en el proceso educativo. Sin embargo,
incluso entre quienes dijeron sentirse emocionalmente estables, se reconoció que este bienestar
es frágil y constantemente amenazado por la sobrecarga de trabajo, los escasos espacios de
escucha institucional y la falta de políticas escolares que prioricen el bienestar del personal
docente. Esta percepción coincide con lo planteado por Madigan et al. (2023), quienes advierten
que el bienestar laboral se ve afectado cuando las exigencias superan los recursos y apoyos
disponibles.
¿Qué factores considera que más afectan su bienestar en el contexto escolar?
Los docentes entrevistados identificaron varios factores que afectan negativamente su
bienestar en el entorno escolar, siendo los más mencionados la carga administrativa excesiva, el
escaso tiempo para la planificación pedagógica y el seguimiento académico de los estudiantes,
así como la presión que generan las evaluaciones trimestrales de desempeño docente aplicadas
por la institución. Estas evaluaciones, que buscan monitorear y mejorar la práctica profesional,
son percibidas por algunos docentes como estresantes, ya que no siempre consideran el contexto
real de trabajo ni las limitaciones operativas del día a día.
Asimismo, señalaron que deben responder a múltiples exigencias simultáneas, como
elaboración de informes, cumplimiento de proyectos institucionales, refuerzos académicos
informales y participación en actividades extracurriculares. A esto se suma la atención a padres
de familia, que en muchos casos demandan tiempo adicional y representan desafíos emocionales
mayores que los propios estudiantes, al mostrar actitudes confrontativas o poco colaborativas.
Esta sobrecarga, unida a la falta de reconocimiento o espacios de apoyo emocional,
genera un desgaste progresivo. Tal como lo plantean Schaufeli et al. (2017) y Kyriacou (2015),
el burnout docente se desarrolla precisamente en escenarios donde las demandas laborales superan
la capacidad personal e institucional para enfrentarlas, deteriorando el bienestar emocional, físico
y profesional del educador.
¿Qué prácticas o hábitos personales ha adoptado para cuidar su bienestar?
Ante la pregunta sobre las prácticas o hábitos personales adoptados para cuidar su
bienestar, los docentes entrevistados mencionaron actividades como caminar, descansar,
compartir tiempo con la familia, escuchar música, mantener una alimentación balanceada y, en
algunos casos, realizar ejercicios ligeros. Muchos coincidieron en que el tiempo fuera del aula es
fundamental para desconectarse del estrés laboral. Un docente señaló: "Trato de dejar los
pendientes en la escuela, en casa soy padre y esposo, no profesor", mientras que otra docente
comentó: "A veces solo necesito silencio, llegar a casa, cerrar la puerta y respirar profundo".
Estas respuestas evidencian que, aunque no siempre se accede a estrategias institucionales, los
docentes buscan pequeñas acciones cotidianas para preservar su bienestar físico y emocional.
Vol. 12/ Núm. 2 2025 pág. 1773
¿Qué importancia le atribuye al equilibrio entre la vida personal y la vida laboral para
conservar su salud integral como docente?
Los docentes entrevistados otorgaron una alta relevancia al equilibrio entre la vida
personal y la vida laboral, considerándolo esencial para mantener su salud integral. Coincidieron
en que cuando este balance se rompe, aumentan los niveles de estrés, ansiedad y agotamiento,
afectando no solo su bienestar físico y emocional, sino también su desempeño en el aula.
Uno de los docentes expresó que “cuando el trabajo se lleva a casa, uno nunca
desconecta, y eso pasa factura”, mientras que otra docente comentó que “tener tiempo para mi
familia y para mí misma me permite recargar energías y estar mejor para mis estudiantes”. Estas
percepciones reflejan que los docentes son conscientes de que cuidar su vida personal es un pilar
fundamental para ejercer su profesión con calidad y sostenibilidad en el tiempo.
Bloque 2: Desgaste profesional
¿Ha sentido en algún momento síntomas de agotamiento emocional, desmotivación o estrés
continuo debido a su trabajo? ¿Podría compartir alguna experiencia concreta?
Las respuestas de los docentes fueron contundentes: todos afirmaron haber
experimentado, en algún momento de su carrera, síntomas de agotamiento emocional,
desmotivación o estrés prolongado. Algunos lo vinculan directamente con los picos de carga
laboral en el trimestre, especialmente cuando coinciden actividades administrativas, refuerzos
académicos, reuniones con padres de familia, procesos de evaluación institucional o adicional
actividades con DECE (Departamento de Consejería Estudiantil). Una docente manifestó: “Hay
semanas en las que apenas puedo dormir; entre planificaciones, correcciones, y el trabajo en
casa, siento que no tengo vida”. Esta percepción se repite con frecuencia, reflejando una
afectación emocional y física sostenida.
Muchos docentes también señalaron que este agotamiento no siempre es visible para la
administración o sus colegas, lo que incrementa su sensación de invisibilidad y soledad
profesional. “Uno tiene que sonreír frente a los estudiantes, aunque por dentro esté colapsando”,
dijo un maestro con más de quince años de experiencia. Las emociones acumuladas, la falta de
reconocimiento y el ritmo acelerado del sistema educativo derivan en episodios de irritabilidad,
cansancio crónico y pérdida del interés por innovar en el aula.
Varios de los entrevistados compartieron experiencias específicas que marcaron su salud
emocional. Uno relató que, tras un año particularmente difícil, donde además de dar clases tuvo
que cubrir a un compañero que se retiró inesperadamente, terminó el ciclo escolar con ansiedad
y síntomas físicos como insomnio, dolores musculares y pérdida de apetito. Otro docente
mencionó haber considerado dejar la profesión: “Llegué a pensar que ya no servía para esto. Me
sentía estancado, con la sensación de estar dando lo mejor de mí sin ningún cambio visible”.
Estos testimonios reflejan que el desgaste no es un fenómeno pasajero, sino una situación con
consecuencias profundas.
¿Qué importancia le atribuye al equilibrio entre la vida personal y la vida laboral para
conservar su salud integral como docente?
Los docentes entrevistados otorgaron una alta relevancia al equilibrio entre la vida
personal y la vida laboral, considerándolo esencial para mantener su salud integral. Coincidieron
en que cuando este balance se rompe, aumentan los niveles de estrés, ansiedad y agotamiento,
afectando no solo su bienestar físico y emocional, sino también su desempeño en el aula.
Uno de los docentes expresó que “cuando el trabajo se lleva a casa, uno nunca
desconecta, y eso pasa factura”, mientras que otra docente comentó que “tener tiempo para mi
familia y para mí misma me permite recargar energías y estar mejor para mis estudiantes”. Estas
percepciones reflejan que los docentes son conscientes de que cuidar su vida personal es un pilar
fundamental para ejercer su profesión con calidad y sostenibilidad en el tiempo.
Bloque 2: Desgaste profesional
¿Ha sentido en algún momento síntomas de agotamiento emocional, desmotivación o estrés
continuo debido a su trabajo? ¿Podría compartir alguna experiencia concreta?
Las respuestas de los docentes fueron contundentes: todos afirmaron haber
experimentado, en algún momento de su carrera, síntomas de agotamiento emocional,
desmotivación o estrés prolongado. Algunos lo vinculan directamente con los picos de carga
laboral en el trimestre, especialmente cuando coinciden actividades administrativas, refuerzos
académicos, reuniones con padres de familia, procesos de evaluación institucional o adicional
actividades con DECE (Departamento de Consejería Estudiantil). Una docente manifestó: “Hay
semanas en las que apenas puedo dormir; entre planificaciones, correcciones, y el trabajo en
casa, siento que no tengo vida”. Esta percepción se repite con frecuencia, reflejando una
afectación emocional y física sostenida.
Muchos docentes también señalaron que este agotamiento no siempre es visible para la
administración o sus colegas, lo que incrementa su sensación de invisibilidad y soledad
profesional. “Uno tiene que sonreír frente a los estudiantes, aunque por dentro esté colapsando”,
dijo un maestro con más de quince años de experiencia. Las emociones acumuladas, la falta de
reconocimiento y el ritmo acelerado del sistema educativo derivan en episodios de irritabilidad,
cansancio crónico y pérdida del interés por innovar en el aula.
Varios de los entrevistados compartieron experiencias específicas que marcaron su salud
emocional. Uno relató que, tras un año particularmente difícil, donde además de dar clases tuvo
que cubrir a un compañero que se retiró inesperadamente, terminó el ciclo escolar con ansiedad
y síntomas físicos como insomnio, dolores musculares y pérdida de apetito. Otro docente
mencionó haber considerado dejar la profesión: “Llegué a pensar que ya no servía para esto. Me
sentía estancado, con la sensación de estar dando lo mejor de mí sin ningún cambio visible”.
Estos testimonios reflejan que el desgaste no es un fenómeno pasajero, sino una situación con
consecuencias profundas.
Vol. 12/ Núm. 2 2025 pág. 1774
En general, las emociones negativas se intensifican cuando los docentes perciben que sus
esfuerzos no se traducen en mejoras tangibles o cuando se enfrentan a entornos escolares poco
empáticos o burocráticos. La experiencia compartida por los participantes muestra la urgencia de
implementar acciones sostenidas para prevenir este tipo de desgaste antes de que afecte la salud
integral del profesional.
¿Cómo cree que el desgaste profesional impacta en su desempeño docente y en el
aprendizaje de sus estudiantes?
Las respuestas de los docentes entrevistados reflejan que el desgaste profesional afecta
directamente tanto su motivación como la calidad del proceso de enseñanza-aprendizaje. Varios
afirmaron sentirse emocional y físicamente agotados, lo que reduce su capacidad para planificar
con creatividad, mantener la paciencia y adaptarse a las necesidades del alumnado. Esta
disminución en el bienestar emocional y físico compromete su implicación en el aula, generando
clases más mecánicas y menos dinámicas. En palabras de una docente: “Hay días que uno entra
al aula por inercia, sin esa energía de antes, y eso los chicos lo sienten”.
Este fenómeno puede comprenderse desde la definición de burnout docente propuesta por
Schaufeli et al. (2017), quienes explican que se trata de una desconexión mental y emocional del
trabajo, acompañada de síntomas como el desánimo y la disminución del compromiso
profesional. Asimismo, como señalan Skaalvik y Skaalvik (2018), este agotamiento influye
directamente en la pérdida del entusiasmo por enseñar. Cuando los docentes no encuentran
recursos personales o institucionales suficientes para afrontar las altas demandas escolares, como
lo evidencian también Arvidsson et al. (2019) y Bakker y Demerouti (2017), se ven
comprometidas tanto su estabilidad emocional como su efectividad pedagógica, afectando no solo
su bienestar sino también el de sus estudiantes.
¿Cuáles cree que son las principales causas del desgaste profesional en su contexto
educativo?
Los docentes entrevistados coincidieron en que el exceso de responsabilidades
administrativas es una de las principales causas de desgaste profesional. Además de planificar y
dictar clases, deben encargarse de informes, elaboración de evidencias y cumplir con tareas
institucionales que, en muchos casos, consideran repetitivas o innecesarias. Esta sobrecarga limita
el tiempo disponible para la innovación pedagógica y afecta su equilibrio personal. Muchos
expresaron que la presión constante por cumplir con plazos y formatos administrativos genera
una sensación de agobio, afectando directamente su motivación y bienestar emocional.
Otro elemento recurrente en las entrevistas fue la asignación de materias fuera del área
de especialización del docente, lo que incrementa el estrés al tener que preparar contenidos que
no dominan con seguridad. A esto se suma la dificultad para gestionar las relaciones con padres
de familia, quienes en ocasiones presentan actitudes demandantes o poco empáticas, generando
un desgaste emocional adicional. Asimismo, los docentes perciben una falta de apoyo
En general, las emociones negativas se intensifican cuando los docentes perciben que sus
esfuerzos no se traducen en mejoras tangibles o cuando se enfrentan a entornos escolares poco
empáticos o burocráticos. La experiencia compartida por los participantes muestra la urgencia de
implementar acciones sostenidas para prevenir este tipo de desgaste antes de que afecte la salud
integral del profesional.
¿Cómo cree que el desgaste profesional impacta en su desempeño docente y en el
aprendizaje de sus estudiantes?
Las respuestas de los docentes entrevistados reflejan que el desgaste profesional afecta
directamente tanto su motivación como la calidad del proceso de enseñanza-aprendizaje. Varios
afirmaron sentirse emocional y físicamente agotados, lo que reduce su capacidad para planificar
con creatividad, mantener la paciencia y adaptarse a las necesidades del alumnado. Esta
disminución en el bienestar emocional y físico compromete su implicación en el aula, generando
clases más mecánicas y menos dinámicas. En palabras de una docente: “Hay días que uno entra
al aula por inercia, sin esa energía de antes, y eso los chicos lo sienten”.
Este fenómeno puede comprenderse desde la definición de burnout docente propuesta por
Schaufeli et al. (2017), quienes explican que se trata de una desconexión mental y emocional del
trabajo, acompañada de síntomas como el desánimo y la disminución del compromiso
profesional. Asimismo, como señalan Skaalvik y Skaalvik (2018), este agotamiento influye
directamente en la pérdida del entusiasmo por enseñar. Cuando los docentes no encuentran
recursos personales o institucionales suficientes para afrontar las altas demandas escolares, como
lo evidencian también Arvidsson et al. (2019) y Bakker y Demerouti (2017), se ven
comprometidas tanto su estabilidad emocional como su efectividad pedagógica, afectando no solo
su bienestar sino también el de sus estudiantes.
¿Cuáles cree que son las principales causas del desgaste profesional en su contexto
educativo?
Los docentes entrevistados coincidieron en que el exceso de responsabilidades
administrativas es una de las principales causas de desgaste profesional. Además de planificar y
dictar clases, deben encargarse de informes, elaboración de evidencias y cumplir con tareas
institucionales que, en muchos casos, consideran repetitivas o innecesarias. Esta sobrecarga limita
el tiempo disponible para la innovación pedagógica y afecta su equilibrio personal. Muchos
expresaron que la presión constante por cumplir con plazos y formatos administrativos genera
una sensación de agobio, afectando directamente su motivación y bienestar emocional.
Otro elemento recurrente en las entrevistas fue la asignación de materias fuera del área
de especialización del docente, lo que incrementa el estrés al tener que preparar contenidos que
no dominan con seguridad. A esto se suma la dificultad para gestionar las relaciones con padres
de familia, quienes en ocasiones presentan actitudes demandantes o poco empáticas, generando
un desgaste emocional adicional. Asimismo, los docentes perciben una falta de apoyo
Vol. 12/ Núm. 2 2025 pág. 1775
institucional y acompañamiento frente a estas situaciones, lo que intensifica la sensación de carga
y afecta su compromiso con la profesión.
Bloque 3: Estrategias institucionales
¿Qué tipo de estrategias o programas ha implementado su institución para apoyar el
bienestar del personal docente?
En general, los docentes señalaron que las estrategias institucionales para el bienestar del
personal son escasas o poco sostenidas. Algunos mencionaron la organización ocasional de
jornadas de integración o celebraciones en fechas conmemorativas, pero recalcaron que estas
actividades no se dan con frecuencia ni responden a una planificación enfocada en el cuidado
integral del docente. Además, indicaron que estas actividades, aunque bien intencionadas, no
forman parte de una política institucional sólida que promueva el bienestar docente de forma
estructurada, continua y coherente con las necesidades reales del profesorado.
¿Qué tipo de apoyo desearía recibir por parte de la institución para prevenir el desgaste
profesional?
La mayoría de docentes expresó el deseo de contar con un acompañamiento más
constante y humano por parte de los directivos, especialmente en lo que respecta a la gestión
emocional y la redistribución equitativa de las cargas laborales. Algunos sugirieron la
implementación de espacios periódicos de diálogo donde puedan expresar sus necesidades y
preocupaciones sin temor a represalias. También se propuso la incorporación de profesionales en
el área de salud mental que brinden atención personalizada o asesorías grupales sobre cómo
manejar el estrés laboral y mejorar la convivencia dentro del plantel.
Además, indicaron que sería positivo recibir capacitaciones enfocadas en la gestión del
tiempo, resolución de conflictos y estrategias de autocuidado, pero de forma práctica y adaptada
a sus realidades. También se valoraría una mayor flexibilidad en el cumplimiento de tareas
administrativas, así como el respeto a los tiempos personales, especialmente en etapas del año
escolar donde la carga aumenta. Para muchos, el simple hecho de sentirse escuchados y valorados
ya representaría un paso importante hacia la prevención del desgaste profesional.
Bloque 4: Innovación y propuestas
Desde su experiencia, ¿qué estrategias innovadoras cree que podrían implementarse para
fomentar el bienestar docente de forma más efectiva?
Los docentes entrevistados coincidieron en que, para promover el bienestar de manera
más efectiva, es necesario ir más allá de actividades recreativas ocasionales y apostar por
estrategias sostenibles que incluyan espacios reales de escucha y participación docente. Se sugirió
la implementación de “aulas de descarga emocional”, donde se pueda hablar sin juicio sobre las
tensiones del trabajo diario, así como programas permanentes de acompañamiento psicológico
dentro de la institución. Otra propuesta mencionada fue la flexibilización de ciertos procesos
institucional y acompañamiento frente a estas situaciones, lo que intensifica la sensación de carga
y afecta su compromiso con la profesión.
Bloque 3: Estrategias institucionales
¿Qué tipo de estrategias o programas ha implementado su institución para apoyar el
bienestar del personal docente?
En general, los docentes señalaron que las estrategias institucionales para el bienestar del
personal son escasas o poco sostenidas. Algunos mencionaron la organización ocasional de
jornadas de integración o celebraciones en fechas conmemorativas, pero recalcaron que estas
actividades no se dan con frecuencia ni responden a una planificación enfocada en el cuidado
integral del docente. Además, indicaron que estas actividades, aunque bien intencionadas, no
forman parte de una política institucional sólida que promueva el bienestar docente de forma
estructurada, continua y coherente con las necesidades reales del profesorado.
¿Qué tipo de apoyo desearía recibir por parte de la institución para prevenir el desgaste
profesional?
La mayoría de docentes expresó el deseo de contar con un acompañamiento más
constante y humano por parte de los directivos, especialmente en lo que respecta a la gestión
emocional y la redistribución equitativa de las cargas laborales. Algunos sugirieron la
implementación de espacios periódicos de diálogo donde puedan expresar sus necesidades y
preocupaciones sin temor a represalias. También se propuso la incorporación de profesionales en
el área de salud mental que brinden atención personalizada o asesorías grupales sobre cómo
manejar el estrés laboral y mejorar la convivencia dentro del plantel.
Además, indicaron que sería positivo recibir capacitaciones enfocadas en la gestión del
tiempo, resolución de conflictos y estrategias de autocuidado, pero de forma práctica y adaptada
a sus realidades. También se valoraría una mayor flexibilidad en el cumplimiento de tareas
administrativas, así como el respeto a los tiempos personales, especialmente en etapas del año
escolar donde la carga aumenta. Para muchos, el simple hecho de sentirse escuchados y valorados
ya representaría un paso importante hacia la prevención del desgaste profesional.
Bloque 4: Innovación y propuestas
Desde su experiencia, ¿qué estrategias innovadoras cree que podrían implementarse para
fomentar el bienestar docente de forma más efectiva?
Los docentes entrevistados coincidieron en que, para promover el bienestar de manera
más efectiva, es necesario ir más allá de actividades recreativas ocasionales y apostar por
estrategias sostenibles que incluyan espacios reales de escucha y participación docente. Se sugirió
la implementación de “aulas de descarga emocional”, donde se pueda hablar sin juicio sobre las
tensiones del trabajo diario, así como programas permanentes de acompañamiento psicológico
dentro de la institución. Otra propuesta mencionada fue la flexibilización de ciertos procesos
Vol. 12/ Núm. 2 2025 pág. 1776
administrativos, como la planificación o el reporte de refuerzos académicos, que actualmente
generan una carga innecesaria y repetitiva.
Asimismo, se habló de la necesidad de integrar prácticas de autocuidado como parte de
la cultura institucional, no como responsabilidades individuales desligadas del entorno laboral.
Por ejemplo, se propuso destinar al menos un día al trimestre para talleres de manejo del estrés,
relajación o actividades de expresión artística con el fin de reconectar emocionalmente con la
vocación docente. Algunos mencionaron también el uso de tecnología para optimizar tareas
repetitivas, liberando tiempo para el trabajo pedagógico real. Estas ideas reflejan un deseo de
transformar la rutina escolar en un espacio que también cuida a quienes educan.
¿Qué rol considera que deberían tener los directivos escolares en la prevención del desgaste
profesional docente?
La mayoría de los docentes entrevistados afirmaron que los directivos deben asumir un
rol proactivo, empático y cercano en la prevención del desgaste profesional. No basta con cumplir
funciones administrativas; se espera de ellos una gestión humana, capaz de reconocer las
necesidades emocionales del equipo docente. Para muchos, el liderazgo escolar debe enfocarse
en generar ambientes de confianza, donde se pueda hablar con libertad sobre las dificultades del
trabajo sin temor a represalias o juicios negativos. En palabras de una docente: “a veces no
queremos soluciones, solo que nos escuchen con respeto”.
También se destacó que los directivos tienen la responsabilidad de velar por una
distribución equitativa de la carga laboral y de evitar la sobreasignación de tareas fuera de las
funciones docentes. Algunos profesores señalaron que ciertos liderazgos priorizan únicamente los
resultados académicos, dejando de lado el desgaste humano que conllevan muchas de esas metas.
Por ello, se propone que la formación en liderazgo educativo contemple módulos sobre salud
mental, gestión emocional y bienestar laboral, para que los directivos puedan actuar como aliados
estratégicos en la promoción del equilibrio profesional y personal del profesorado.
¿Qué recomendaciones daría a otras instituciones educativas para fortalecer el bienestar
del profesorado?
Los docentes entrevistados coinciden en que es urgente que las instituciones educativas
reconozcan el bienestar del profesorado como una prioridad institucional y no como un aspecto
secundario. Una de las principales recomendaciones fue “establecer espacios donde el docente
también sea escuchado y valorado”, ya que muchos sienten que sus voces no se toman en cuenta
en las decisiones escolares.
También se propuso “crear momentos de convivencia real entre colegas, no solo
reuniones técnicas o evaluaciones”, lo cual permitiría fortalecer el sentido de comunidad y reducir
el aislamiento emocional que, según algunos, predomina en el ambiente laboral. Además,
mencionaron que deberían existir talleres periódicos sobre salud mental y manejo del estrés, no
como algo esporádico, sino como parte integral de la formación docente continua.
administrativos, como la planificación o el reporte de refuerzos académicos, que actualmente
generan una carga innecesaria y repetitiva.
Asimismo, se habló de la necesidad de integrar prácticas de autocuidado como parte de
la cultura institucional, no como responsabilidades individuales desligadas del entorno laboral.
Por ejemplo, se propuso destinar al menos un día al trimestre para talleres de manejo del estrés,
relajación o actividades de expresión artística con el fin de reconectar emocionalmente con la
vocación docente. Algunos mencionaron también el uso de tecnología para optimizar tareas
repetitivas, liberando tiempo para el trabajo pedagógico real. Estas ideas reflejan un deseo de
transformar la rutina escolar en un espacio que también cuida a quienes educan.
¿Qué rol considera que deberían tener los directivos escolares en la prevención del desgaste
profesional docente?
La mayoría de los docentes entrevistados afirmaron que los directivos deben asumir un
rol proactivo, empático y cercano en la prevención del desgaste profesional. No basta con cumplir
funciones administrativas; se espera de ellos una gestión humana, capaz de reconocer las
necesidades emocionales del equipo docente. Para muchos, el liderazgo escolar debe enfocarse
en generar ambientes de confianza, donde se pueda hablar con libertad sobre las dificultades del
trabajo sin temor a represalias o juicios negativos. En palabras de una docente: “a veces no
queremos soluciones, solo que nos escuchen con respeto”.
También se destacó que los directivos tienen la responsabilidad de velar por una
distribución equitativa de la carga laboral y de evitar la sobreasignación de tareas fuera de las
funciones docentes. Algunos profesores señalaron que ciertos liderazgos priorizan únicamente los
resultados académicos, dejando de lado el desgaste humano que conllevan muchas de esas metas.
Por ello, se propone que la formación en liderazgo educativo contemple módulos sobre salud
mental, gestión emocional y bienestar laboral, para que los directivos puedan actuar como aliados
estratégicos en la promoción del equilibrio profesional y personal del profesorado.
¿Qué recomendaciones daría a otras instituciones educativas para fortalecer el bienestar
del profesorado?
Los docentes entrevistados coinciden en que es urgente que las instituciones educativas
reconozcan el bienestar del profesorado como una prioridad institucional y no como un aspecto
secundario. Una de las principales recomendaciones fue “establecer espacios donde el docente
también sea escuchado y valorado”, ya que muchos sienten que sus voces no se toman en cuenta
en las decisiones escolares.
También se propuso “crear momentos de convivencia real entre colegas, no solo
reuniones técnicas o evaluaciones”, lo cual permitiría fortalecer el sentido de comunidad y reducir
el aislamiento emocional que, según algunos, predomina en el ambiente laboral. Además,
mencionaron que deberían existir talleres periódicos sobre salud mental y manejo del estrés, no
como algo esporádico, sino como parte integral de la formación docente continua.
Vol. 12/ Núm. 2 2025 pág. 1777
Por otro lado, varios entrevistados sugirieron que se implemente una política clara de
reconocimiento al esfuerzo docente. Uno expresó: “a veces un simple gracias o un ‘lo hiciste bien’
cambia todo el día”. Otra docente indicó que “trabajamos muchas horas extras sin que eso se vea
o se considere”, lo que provoca desmotivación y agotamiento. En este sentido, recomendaron
acciones concretas como respetar los horarios de trabajo, evitar la sobrecarga con tareas
administrativas innecesarias y promover un liderazgo directivo más humano. En conjunto, estas
recomendaciones apuntan a construir entornos escolares más empáticos, sostenibles y centrados
en las personas que educan.
CONCLUSIONES
Los resultados de esta investigación evidencian que el bienestar docente en la Unidad
Educativa del Milenio Ileana Espinel Cedeño se encuentra condicionado por múltiples factores,
tanto personales como institucionales. Los docentes manifestaron sentirse emocional, física y
mentalmente sobrecargados debido al exceso de tareas administrativas, la atención constante a
estudiantes y padres de familia, la poca delimitación entre vida personal y laboral, y la presión
por cumplir con evaluaciones y responsabilidades que, en muchos casos, rebasan su jornada
laboral. A pesar de esto, los docentes intentan adoptar estrategias personales como el diálogo con
colegas, la recreación familiar y el descanso, aunque reconocen que no siempre son suficientes ni
sostenidas en el tiempo.
En cuanto al desgaste profesional, las entrevistas permitieron inferir que muchos docentes
han experimentado síntomas de agotamiento, desmotivación y frustración, especialmente por la
falta de reconocimiento institucional, la asignación de materias fuera de su especialidad y la
escasa participación en procesos de toma de decisiones. Si bien la institución ha implementado
algunas acciones puntuales como jornadas de integración, estas no responden a una política
sistemática de bienestar. Además, el apoyo directivo es percibido como limitado, lo cual
profundiza la sensación de aislamiento y estrés laboral.
Por tanto, se recomienda diseñar e implementar un plan institucional de bienestar docente
con carácter permanente, que incluya programas de acompañamiento emocional, espacios de
escucha activa, jornadas de autocuidado y formación continua en gestión del estrés. También se
sugiere fortalecer el liderazgo pedagógico de los directivos, promoviendo un clima laboral más
humano y participativo. Finalmente, resulta fundamental que las instituciones educativas
reconozcan que cuidar del bienestar del docente no es un lujo, sino una necesidad que impacta
directamente en la calidad del proceso educativo.
Por otro lado, varios entrevistados sugirieron que se implemente una política clara de
reconocimiento al esfuerzo docente. Uno expresó: “a veces un simple gracias o un ‘lo hiciste bien’
cambia todo el día”. Otra docente indicó que “trabajamos muchas horas extras sin que eso se vea
o se considere”, lo que provoca desmotivación y agotamiento. En este sentido, recomendaron
acciones concretas como respetar los horarios de trabajo, evitar la sobrecarga con tareas
administrativas innecesarias y promover un liderazgo directivo más humano. En conjunto, estas
recomendaciones apuntan a construir entornos escolares más empáticos, sostenibles y centrados
en las personas que educan.
CONCLUSIONES
Los resultados de esta investigación evidencian que el bienestar docente en la Unidad
Educativa del Milenio Ileana Espinel Cedeño se encuentra condicionado por múltiples factores,
tanto personales como institucionales. Los docentes manifestaron sentirse emocional, física y
mentalmente sobrecargados debido al exceso de tareas administrativas, la atención constante a
estudiantes y padres de familia, la poca delimitación entre vida personal y laboral, y la presión
por cumplir con evaluaciones y responsabilidades que, en muchos casos, rebasan su jornada
laboral. A pesar de esto, los docentes intentan adoptar estrategias personales como el diálogo con
colegas, la recreación familiar y el descanso, aunque reconocen que no siempre son suficientes ni
sostenidas en el tiempo.
En cuanto al desgaste profesional, las entrevistas permitieron inferir que muchos docentes
han experimentado síntomas de agotamiento, desmotivación y frustración, especialmente por la
falta de reconocimiento institucional, la asignación de materias fuera de su especialidad y la
escasa participación en procesos de toma de decisiones. Si bien la institución ha implementado
algunas acciones puntuales como jornadas de integración, estas no responden a una política
sistemática de bienestar. Además, el apoyo directivo es percibido como limitado, lo cual
profundiza la sensación de aislamiento y estrés laboral.
Por tanto, se recomienda diseñar e implementar un plan institucional de bienestar docente
con carácter permanente, que incluya programas de acompañamiento emocional, espacios de
escucha activa, jornadas de autocuidado y formación continua en gestión del estrés. También se
sugiere fortalecer el liderazgo pedagógico de los directivos, promoviendo un clima laboral más
humano y participativo. Finalmente, resulta fundamental que las instituciones educativas
reconozcan que cuidar del bienestar del docente no es un lujo, sino una necesidad que impacta
directamente en la calidad del proceso educativo.
Vol. 12/ Núm. 2 2025 pág. 1778
REFERENCIAS
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among school teachers: Quantitative and qualitative results from a follow-up study in
southern Sweden. BMC Public Health, 19(1), 1–13. doi:10.1186/s12889-019-6972-1
Bakker, A. B., & Demerouti, E. (2017). Job demands–resources theory: Taking stock and looking
forward. Journal of Occupational Health Psychology, 22(3), 273.
doi:10.1037/ocp0000056
Córdoba, A., Dominguez, A., & Marino, A. (2020). Síndrome de desgaste profesional en
psicopedagogos que desempeñan el rol de acompañantes personales no docentes y
acompañantes externos en escuelas primarias del área metropolitana de Buenos Aires en
el período 2020.
Laybourn, S., Frenzel, A. C., & Fenzl, T. (2019). Teacher procrastination, emotions, and stress:
A qualitative study. Frontiers in Psychology, 10, 2325. doi:10.3389/fpsyg.2019.02325
Madigan, D. J., Kim, L. E., Glandorf, H. L., & Kavanagh, O. (2023). Teacher burnout and
physical health: A systematic review. International Journal of Educational Research, 119,
102173. doi:10.1016/j.ijer.2023.102173
Madigan, D. J., & Kim, L. E. (2021). Does teacher burnout affect students? A systematic review
of its association with academic achievement and student-reported outcomes.
International Journal of Educational Research, 105, 101714.
doi:10.1016/j.ijer.2020.101714
Monsivais, C. L. R., Vargas, M. C., Vázquez, L. M., & Andrade, Y. A. (2023). El Desgaste
Profesional en el Ámbito Educativo¿ Cómo Prevenirlo?. Ciencia Latina Revista
Científica Multidisciplinar, 7(6), 1843-1857.
Rodríguez Ramírez, J. A., Guevara Araiza, A., & Viramontes Anaya, E. (2017). Síndrome de
burnout en docentes. IE Revista de Investigación Educativa de la REDIECH, 8(14), 45-
67.
Räsänen, K., Pietarinen, J., Soini, T., Väisänen, P., & Pyhältö, K. (2022). Experienced risk of
burnout among teachers with persistent turnover intentions. Teacher development, 26(3),
317-337.
Schaufeli, W. B., Shimazu, A., Hakanen, J., Salanova, M., & De Witte, H. (2017). An ultra-short
measure for work engagement. European Journal of Psychological Assessment,
doi:10.1027/1015-5759/a000430
Skaalvik, E. M., & Skaalvik, S. (2018). Job demands and job resources as predictors of teacher
motivation and well-being. Social Psychology of Education, 21(5), 1251–1275.
doi:10.1007/s11218-018-9464-8
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psicopedagogos que desempeñan el rol de acompañantes personales no docentes y
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